Todos quieren un hogar seguro para su familia. Las alarmas de puerta son una forma de detector de movimiento que le notificará cuando alguien llegue a su puerta e intente entrar.
Ahora no se preguntará si escuchó algo en medio de la noche. La alarma de la puerta hará sonar una alarma muy fuerte, por lo que no habrá duda de que alguien está tratando de entrar.
Mientras sepa que no es su adolescente el que intenta colarse a las 2 de la mañana, entonces es hora de llamar al 911 para que puedan venir y atrapar al chico malo que está tratando de arruinar su noche. La alarma de la puerta lo mantendrá alejado del escenario de bajar las escaleras con un palo de golf o un bate de béisbol listo para pelear con cualquiera que esté al pie de las escaleras.
¡No trates de ser un héroe! Deje que la policía se encargue de atrapar al asqueroso que intenta invadir su hogar.
Las alarmas de las puertas son pequeñas, económicas y muy efectivas. Funcionan con baterías y se pueden colocar en cualquier lugar. Estos dispositivos también son portátiles para que pueda llevarlos de vacaciones con usted o para un viaje de negocios. Hay más robos en moteles y hoteles de los que puedas imaginar. Llevar uno de estos dispositivos con usted como protección adicional cuando viaje le ayudará a evitar que se convierta en otra estadística de delitos.
Las alarmas de las puertas tienen diferentes tamaños y formas, pero la función es la misma: alertar a cualquier persona en la casa de que alguien está tratando de entrar.
Estos dispositivos son fáciles de configurar. Hay un tipo que coloca en el pomo de la puerta y cuando alguien toca el pomo, se activa la alarma.
Otros tipos son como una cuña de puerta: la coloca en la parte inferior de la puerta y cuando alguien intenta entrar, activa la alarma.
Otros están asegurados a la pared en el set sobre una mesa para que detecten cualquier movimiento cuando alguien intente entrar por la puerta.
Cualquiera de los modelos anteriores es ideal para dormitorios universitarios donde su hija o hijo quiere privacidad. No permita que su hijo salga de casa sin algún tipo de alarma en la puerta. Casi garantizaré que cuando sus compañeros residentes vean la alarma de la puerta en acción, querrán una para ellos.